Gerald Leslie Brockhurst

Olliver St. John Gogarty

1942

Oliver Joseph St. John Gogarty (17 de agosto de 1878 - 22 de septiembre de 1957) fue un poeta y escritor irlandés, otorrinolaringólogo, deportista, político y conocido conversador. Sirvió de inspiración para Buck Mulligan en la novela Ulises de James Joyce. Tras asistir a la Escuela de Arte de Birmingham, el artista ingresó en la Royal Academy Schools de Londres, donde recibió la Gold Medal y la Traveling Scholarship en 1913. El premio le permitió visitar París e Italia, donde estudió obras de los primeros pintores italianos. De 1915 a 1919, el artista vivió en Irlanda, donde conoció al pintor Augustus John, cuyo estilo pictórico estaba influido por la simplicidad de colores y formas del arte francés contemporáneo. En 1919 regresó a Inglaterra para su primera exposición importante en una galería. Durante la década de 1920, el artista se convirtió en grabador, centrándose principalmente en retratos femeninos y utilizando a su esposa como modelo. La frialdad, la perfección técnica y un clasicismo manifiesto marcan tanto su estilo de grabado como su manera de pintar. En 1930 había vuelto a la pintura con una nueva modelo adolescente, Dorette Woodard, con la que más tarde se casó. Sus inquietantes retratos de ella le abrieron las puertas de la fama y la fortuna, y se convirtió en un retratista de moda; su objetivo declarado era captar la apariencia, no el carácter. Entre sus modelos se encontraban J. Paul Getty, Marlene Dietrich y la duquesa de Windsor. En 1939, en la cima de su éxito, el artista se instaló en Estados Unidos. Gerald Brockhurst es conocido sobre todo por sus retratos y grabados de mujeres glamurosas. Considerado desde los doce años como un joven Botticelli, estudió en Inglaterra, Francia e Italia. La colocación por parte de Brockhurst de un retrato dentro de un paisaje circundante, recuerda la obra de los maestros del Renacimiento italiano, ya que hay una sensación de misterio y de lo desconocido, que separa al espectador de los retratados. A los modelos de Brockhurst se les da un énfasis adicional por su entorno y suelen estar compuestos en primer plano, mirando directamente hacia usted, colocados en un espacio poco profundo, contra un saliente o sobre un fondo en blanco. Cambiando la pose, el escenario o el vestuario podía transformar aparentemente a la modelo en una persona totalmente distinta. Para añadir al manto de misterio y romanticismo de la imagen, y fomentar la imaginación del espectador, el artista ponía títulos exóticos, como Ofelia, Xenia y Anaïs. En el Reino Unido, en los años 30, y más tarde en Nueva York, Brockhurst se convirtió en un retratista de moda, con clientes famosos como Marlene Dietrich y la duquesa de Windsor. En retrospectiva, se le considera un retratista y grabador impresionante.