Anillo de cóctel de oro amarillo con ópalo blanco etíope y diamantes en cabujón de 3,70 quilates

A lo largo de tres generaciones, la familia Malakov ha construido un negocio que se extiende desde la Ruta de la Seda de Asia Central hasta Europa, Nueva York y más allá. El nombre de Roman Malakov es ahora sinónimo de joyas y relojes de calidad. Desde anillos de compromiso a alianzas de boda, pasando por piezas patrimoniales y joyería de alta gama, la empresa elabora cuidadosamente a mano todas sus piezas, entendiendo que cada una inmortaliza una relación especial o una experiencia memorable en la vida de un cliente. Las piedras utilizadas proceden directamente de las minas y son inspeccionadas por expertos para garantizar que cumplen estrictas normas de calidad. Además de la personalización, Roman Malakov ofrece arreglos, para asegurarse de que una pieza se ajusta perfectamente a los gustos y deseos del cliente, así como restauraciones y reparaciones.